lunes, septiembre 19, 2011

Gabinete sin responsables

Francisco Rodríguez / Índice Político

Hoy más que nunca es indispensable revisar e impulsar la iniciativa de reforma política presentada por el senador Manlio Fabio Beltrones que, como puntos torales, establece acotar el sistema presidencialista y obligar al Ejecutivo Federal a que los nombramientos de su gabinete sean sometidos a la valoración y aprobación de la Cámara Alta.

De lograrse esta aprobación, pendiente en la Cámara de Diputados, ya no veríamos situaciones que tanto han agraviado a los mexicanos y que desgraciadamente continuarán por los próximos 14 meses… como hasta ahora ha ocurrido con las designaciones de Felipe Calderón para favorecer a sus cuates, amigochos y compañeros de todo tipo de aventuras, pero a todas luces incapaces de desempeñar los cargos de alta responsabilidad pública.

Gabinete, el del señor Calderón, “lleno de ni-nis que ni pueden ni saben cómo gobernar al país”, definió el dirigente nacional priísta Humberto Moreira ante los más recientes cambios de colaboradores del ocupante de Los Pinos. “Sin novedad; es la misma gente”, consideró Andrés Manuel López Obrador ante el mismo evento.

De por sí limitado, el michoacano también ha fracasado en la conformación de un equipo eficiente de colaboradores… lo que restringe todavía más su capacidad de operación política. Él mismo se ha encerrado, con graves consecuencias para todo el país.

Lo peor, empero, es que como este escribidor publicó el más reciente 8 de agosto, varios de esos cuates y amigochos de Calderón buscarán el fuero federal para desde ahí evadir la acción de la justicia durante los próximos años por las tropelías cometidas, entre las cuales la inacción y la incapacidad son pecata minuta.

Un caso sobresaliente es el del secretario de la Función Pública, Salvador Vega Casillas, quien por instrucciones de su jefe ha protegido actos de corrupción e incluso homicidios –baste citar el monumental saqueo al ISSSTE perpetrado por Miguel Ángel Yunes y Jesús Villalobos, el infanticido ocurrido en junio de 2009 en la guardería ABC de Hermosillo, Sonora, y en la que no se actuó en contra de un distinguido mafioso panista, Juan Molinar ni en contra de familiares de Margarita Zavala, propietarios de este establecimiento.

Y ahora con respecto al fatídico Casino Royale regiomontano, apenas el pasado 15 de septiembre, por instrucciones de Vega, el director general de Auditoría Gubernamental de la SFP, Max Káiser Aranda, declaró que no se podría investigar ni sancionar a Juan Iván Peña Neder en virtud de que su falta no era grave y ya habría prescrito.

¿Qué pensarán los familiares de las 52 personas que fallecieron por el incendio ocurrido en el antro de Monterrey? ¿Y qué piensa usted, amable lector? Que una omisión que costó 52 vidas ¿no es grave?

Una más de Salvador Vega y de su jefe que así protegen a Peña Neder, para que no involucre a personajes cercanísimos al propio Felipe Calderón, tales como Francisco Ramírez Acuña, Fernando Gómez Mont, Julio Esponda, et al…

Y esto sólo por citar algunos que fueron los verdaderos beneficiados por el otorgamiento de permisos irregulares para la instalación de casinos que, como hongos, se han reproducido en todo el país durante estos funestos cuatro años de calderonato.

Tampoco es raro que el pasado 16 de septiembre el director de Fiscalización del ayuntamiento de Salamanca, Guanajuato –por cierto, panista–, César del Ángel Acosta, haya declarado que las instalaciones en las que próximamente operará un casino de Juan Iván Peña Neder, “están en orden”.

Da lo mismo si más adelante ocurre una tragedia aunque ésta cueste vidas, pues algún personaje protege-mafiosos del gobierno calderonista nos dirá que no hay a quien enjuiciar ya porque “la falta es menor”, porque “ya prescribió” o por lo que usted guste y mande.

Y es que, como usted ya leyó aquí, no sólo desde Gobernación se ha protegido y encubierto la actividad irregular de los casinos, también la SHCP ha beneficiado a estas mafias.

Una prueba es que en la iniciativa de ley de ingresos 2010 se estableció como impuesto al juego con apuestas y sorteos un monto de $2 mil 537 millones de pesos y para 2011 esta cifra fue de $2 mil 488 millones de pesos, cantidad inferior a la del 2010. Esto es inexplicable si tomamos en cuenta que en 2011 funcionan más centros de apuesta y los ingresos de éstos, por ende, han sido mayores que en 2010.

Por algo el líder del PRI, Humberto Moreira, acusa al ex secretario de Hacienda Ernesto Cordero de protector de casinos. Por algo Fernando Larrazábal se pasó por el arco del triunfo a Gustavo Madero y compañía…

Porque la corrupción a través de los casinos está mucho más arriba del plano municipal, ¿o no?

Índice Flamígero: Otra iniciativa empujada por el sonorense Manlio Fabio Beltrones Rivera es la de un gobierno de coalición. “Facilitará los acuerdos y la solución de los problemas a partir de una mayoría plural, objetivos comunes y un gabinete de calidad”, al referirse a la iniciativa de reforma constitucional presentó en días pasados con el apoyo de legisladores de diversos grupos parlamentarios. “Se trata de que los gobiernos funcionen y dispongan de instrumentos que les permitan superar la desconfianza de los ciudadanos y responder con rapidez a sus demandas de empleo, seguridad y bienestar”.

El espejo

Gregorio Ortega Molina / La Costumbre Del Poder

Los presidentes mexicanos que decidieron operar en soledad su propia sucesión, se equivocaron con gran perjuicio para el país. Felipe Calderón, ensoberbecido, copia el procedimiento de Luis Echeverría, con quien tiene muchas analogías; quizá en secreto y a espaldas de su consciencia y de su padre, en lo más íntimo de sus intimidades, el joven panista admiró al viejo priista. Es posible, e históricamente probable: padecen las mismas obsesiones en cuanto a sus responsabilidades administrativas y políticas.

Ambos determinaron, acertadamente y en su momento particular, que los problemas de la nación en el futuro son de índole económica, pero los dos se equivocaron al considerar que para resolverlos se requiere de un especialista en materia hacendaria. Todos conocen el resultado de la gestión lopezportillista. Es innecesario esperar al de la gestión de Ernesto Cordero. Ninguno de los dos entiende lo que tarde comprendió Carlos Salinas, quien determinó que su sucesor fuese Luis Donaldo Colosio, porque lo que se requiere es desarrollo social, menos mexicanos con pobreza alimentaria, más empleo -como lo ha comprendido Barack Obama- con la idea de fortalecer el mercado interno.

A Colosio lo eliminaron las voluntades de los poderes fácticos y de poder real en Estados Unidos. A Heriberto Félix lo eliminó Felipe Calderón, quizá porque lo estima demasiado y porque tiene en muy poca consideración a sus gobernados.

Lo única realidad de este tema se reduce a lo siguiente: en cuanto decidieron subordinar lo político a lo económico, la codicia se desató y las sociedades perdieron. Los expertos de análisis de problemas económicos del mundo están azorados, perplejos, pues saben que este crisis que se avecina es provocada, que quienes determinaron que así se procediera esperan un cambio en el orden interno de las naciones, pero desconocen si ese cambio será controlable e irá en el sentido que predeterminaron para gobernar sin sobresaltos.

De todo lo leído sobre las consecuencias de la catástrofe económica en la que se hayan inmersas las naciones, nunca los poderes fácticos, me quedo con el análisis de Lina Gálvez Muñoz, publicado en El País el martes 13 de septiembre último, titulado Más desigualdad en el futuro. Escribe la autora: Por la experiencia de las crisis pasadas de la misma naturaleza que la actual, como la asiática o incluso la de 1929, sabemos que de éstas se suele salir con retrocesos en los avances en igualdad entre mujeres y hombres conseguidos durante los periodos expansivos.

Prácticamente todas las crisis económicas contemporáneas que hemos conocido disminuyen el tamaño de la economía formal y aumentan el de la informal y sobre todo, el de la economía doméstica y de cuidados. Y por ello se suele salir de ellas con una intensificación del trabajo doméstico y de cuidados no remunerado que, como es bien sabido, realizan sobre todo las mujeres.

… Se desvanecen instituciones y políticas específicas de igualdad o se realizan planes de gasto dirigidos exclusivamente al fomento del empleo en sectores masculinizados. Y, además, las políticas de drásticos recortes de derechos sociales generan desigualdad de rentas que inevitablemente conllevan las que se dan entre mujeres y hombres, amén de un deterioro de nuestra democracia.

La disminución de las rentas familiares hace que muchos bienes y servicios que antes se adquirían en el mercado tengan que satisfacerse ahora en el seno del hogar. Y los recortes de gasto público social van a redundar inevitablemente en un menor consumo en sanidad, educación o servicios sociales que también obliga a proveerlos desde las unidades familiares mediante trabajo no remunerado.

Todos los precandidatos debieran ver a México en este espejo, pues acá los problemas se magnifican por la inexperiencia de los administradores públicos y la falta de oficio político de quienes hoy gobiernan, ya que a la gravedad de los problemas económicos impuestos por la globalización, deben añadirse los de seguridad pública que tanto merman las finanzas nacionales, como es el caso de la ordeña de gasolinas de los ductos de Pemex, o la equívoca inclinación a invertir más en armas y sofisticados equipos de espionaje, que en educación o la refinería postergada, o en ese torpe idea que intenta calcar la administración de justicia de los procedimientos estadounidenses, cuando ya se ve, a las claras, que los jueces federales son renuentes a los juicios orales al estilo televisivo.

No será como en otras ocasiones, cuando el gasto electoral, que es multimillonario e innecesario, era útil para retrasar la explosión de la crisis, porque ésta ya está entre los mexicanos, que mudos atestiguan cómo el tamaño de sus monederos es cada día menor, mientras el tamaño de su hambre crece precisamente en sentido contrario.

Pero como sostiene mi Demonio de Sócrates ante el inusual intento de Ernesto Cordero por hacerse visible, por ser creíble: “Sus tesis están desconectadas de la realidad, usa de una terminología vacía, de ideales usurpados, de sistemas inflexibles. Es este comportamiento el que a mí, realmente, me da miedo. Es lo que temo, de lo que desconfío. Por supuesto es importante saber qué es correcto y qué no lo es. Sin embargo, los errores de juicio personales pueden corregirse en la mayoría de los casos. Si uno tiene la valentía de reconocer su error, se pueden arreglar. Pero la estrechez de miras y la intolerancia de la gente sin imaginación son igual que parásitos”.

Lo terrible es que el error va más allá de 50 mil muertes y un empobrecimiento sin freno de un buen porcentaje de los mexicanos.

Preocupantes imágenes patrias

Martha Anaya / Crónica de Política

¡Vaya imágenes patrias que nos obsequiaron Alonso Lujambio y Felipe Calderón!

El 15 por la mañana, el secretario de Educación sobresaltó con el tonito de su discurso. No tanto por lo expresado, sino por el énfasis que le dio y el tono regañón (por no decir autoritario) con que lo manifestó.

Y si duda cabía, Lujambio echó mano de los ademanes y golpeó en distintas ocasiones el atril al pie de la columna de la Independencia para restregarnos que el presidente de la República no mintió cuando advirtió al país la necesidad de dar la lucha contra la delincuencia.

Por el contrario, aseguraría ante el asombro del presidente de la Suprema Corte, Juan Silva Meza, ha hablado con la verdad. Ha abierto las puertas de su gobierno, ha escuchado, ha debatido de buena fe y de cara a la nación.

No era una opinión más la de Lujambio. Por el contenido y sobre todo por la forma –el tono–, más parecía un decreto o el arrebato con concluía una agria discusión.

Por la noche, en el Palacio Nacional, al enfilarse para recibir la bandera mexicana, el Jefe del Ejecutivo haría gala de un caminar militar que no habíamos visto en sus predecesores; como tampoco el saludo militar a la bandera.

Hasta donde recordamos, el saludo presidencial al lábaro patrio solía ser la mano a la altura del pecho, con el codo a la altura del hombro.

Y aunque iba vestido de traje la imagen que dejó Calderón esa noche fue más la de un presidente militar más que de un presidente civil.

Será porque estamos en tiempos de guerra…

El zócalo en sí, quedaron como mensajes simbólicos: una plaza apenas a medio llenar (más desangelada incluso que las de las épocas duras de Miguel de la Madrid) y una separación notoria entre los invitados especiales y el pueblo. Los primeros, en gradas situadas frente al balcón del Palacio para mirar de frente “el grito” y dándole la espalda al resto de los asistentes que acudieron a pesar de los pesares.

Del desfile militar el 16 queda entre las imágenes recogidas, la frialdad del presidente de México frente al presidente de la Suprema Corte de Justicia, Juan Silva Meza, a quien ni siquiera se volvía a mirar, ya no digamos a dialogar como lo hizo notoriamente con otros asistentes.

En cuanto al “poderío” mostrado por las Fuerzas Armadas durante su marcha por la Plaza de la Constitución, ocasión de orgullo para algunos, a nosotros más bien nos produjo una sensación de inquietud vis a vis de la debilidad de las instituciones civiles.

Preocupantes imágenes patrias.

PAN: lucha entre dos

Raymundo Riva Palacio / Estrictamente Personal

El dulce que vertió recientemente Felipe Calderón sobre Josefina Vázquez Mota en vísperas de pedir licencia en el Congreso para buscar la candidatura presidencial del PAN, desató la gran ola especulativa que con ese calor a “Pina” -como la llamó cariñosamente-, el Presidente había cambiado o ampliado su mosaico de candidatos. No sería Ernesto Cordero un único delfín. Podría ser ella, de terminar mejor posicionada en la opinión pública, la nueva querubín de Calderón.

En el entorno de Vázquez Mota se animaron con la idea de que la semiótica de Calderón reflejaba un cambio de actitud. No vieron la realidad, clara a los ojos de un observador: Calderón fue muy cariñoso con ella, en un ambiente –los panistas en el Congreso- que la aplaudía y le expresaba su apoyo. Calderón no iba a remar contra esa corriente, pero hizo algo muy fuerte en contra de ella: le arrebató la iniciativa y el momento político a su solicitud de licencia. El Presidente anunció que ella se iba, contra todo protocolo y tacto político, e impidió que el anuncio de su licencia fuera capitalizado políticamente por Vázquez Mota.

Calderón no fue meloso, sino muy duro en las analogías. Cordero no había anunciado que se iba de Hacienda, pero el Presidente obligó a tres secretarios de Estado a dejarle el camino libre. Una vez que salió de Hacienda, la televisión se abrió para él: una larga entrevista en horario estelar en un marco como si fuera ya candidato presidencial, y la transmisión en vivo de un acto panista con él de orador, que le dio un espacio público que provocó muecas entre sus rivales, que no han tenido ni el mismo trato, ni obtenido arropamiento presidencial. Al contrario.

El caso más sobresaliente es el de Roberto Gil, secretario particular del Presidente, que estaba en la primera línea para ir a coordinar la precampaña de Vázquez Mota por la candidatura presidencial. El Presidente no lo dejó renunciar, como deseaba para irse al barco de la contendiente, aunque hace dos meses el propio Gil sentía que Calderón quería deshacerse de él. Se queda en Los Pinos, mientras Vázquez Mota continúa sin un coordinador de campaña con ADN panista, y obligada a recurrir a quien ha sido su estratega, Diódoro Carrasco, ex secretario de Gobernación en el último sexenio priísta.

Pero si hay un trabajo duro por parte del Presidente, también hay un trabajo sucio, encargado a Ana Teresa Aranda, que remplazó a Vázquez Mota en la Secretaría de Desarrollo Social cuando en el sexenio pasado se sumó al equipo de campaña de Calderón. Aranda, una poblana que pertenece a los sectores duros del PAN, no comparte la ideología más liberal de Cordero, pero sus diferencias con Vázquez Mota son viejas, por lo que se unió al grupo extremista en el PAN que ha sido persuadido por el delfín presidencial para sumarse a su campaña.

Hace semanas Cordero doblegó al gobernador de Guanajuato, Juan Manuel Oliva, que iba rumbo a tener problemas con la Función Pública –cuyo secretario Salvador Vega, ya pactó con el delfín- por la compra de terrenos cuando pujó porque se construyera una refinería en su estado, para que lo respaldara, pero aún no logra convencer al gobernador de Morelos, Marco Adame, jefe político de esa facción, que apoya a Vázquez Mota.

La extrema derecha tiene a un candidato, el gobernador de Jalisco, Emilio González, y sabe que aunque carecen de los votos necesarios dentro del PAN para ganar la nominación, sí tienen los que se necesitan para decidir quién gana, como sucedió durante la contienda por la presidencia del partido, donde pactaron con Gustavo Madero y lo llevaron al liderazgo nacional a cambio de la secretaría general. El papel protagónico de González puede verse como un intento por elevar el perfil de esa facción y, por tanto, del costo que tendrá su adhesión.

Vázquez Mota no tiene los recursos de Cordero –con la permanente sombra del Presidente y lo que eso significa- para persuadir a panistas a que voten por ella en la elección interna que decidirá en la primavera de 2012 su candidatura, ni poder sobre presupuestos estatales, o partidas para impactar municipios. Tampoco tiene qué ofrecer materialmente a políticos locales para ganar su apoyo, o herramientas para neutralizar venganzas y represalias al más alto nivel si desairan a Cordero.

Tiene en cambio, un factor intangible que empieza a jugar a su favor: el desencanto de operadores eficientes que se han alejado de Cordero. El primero fue Jorge Manzanera, con mala fama, pero ampliamente reconocido como operador y conocedor de las entrañas del PAN. Otro es Miguel Ángel Yunes, que saltó de la trinchera de Cordero para sumarse esta semana a la de Vázquez Mota.

Manzanera es, junto con el ex alcalde de Tijuana Jorge Ramos, de gran prestigio dentro del partido por el trabajo que realizó en aquella ciudad, operador en jefe para la estructura territorial. Yunes, como Manzanera tiene negativos políticos, pero a la vista de las necesidades, los beneficios para Vázquez Mota son mayores que los costos. Sobretodo porque en la medida que calderonistas se empiecen a alejar de Cordero, como el caso de ambos o recientemente de Rodolfo Elizondo, ex secretario de Turismo, la percepción de su crecimiento se incrementará.

La lucha por la candidatura presidencial del PAN incluye a un cuarto aspirante, el ex senador Santiago Creel, quien es la pieza clave para cuando empiece oficialmente el proceso de 2012, el próximo mes, y quien definirá en buena medida cómo se a acomodan las fichas. Creel sostiene que no declinará, pero sus números de preferencia electoral se han venido reduciendo ligeramente, lo que es grave, pues después de seis años de campaña, no crece en intención de voto.

Creel puede evaluar en las próximas semanas si se arriesga a una derrota o declina a favor de Vázquez Mota y juega contra Cordero. Este sería el mejor escenario para Vázquez Mota. Para Cordero, una lucha entre tres es preferible, porque el voto anti Calderón se dividiría entre dos y el delfín podría avanzar por en medio de los dos. Si fuera de dos, el ideal sería Creel, a quien ven un adversario bastante más fácil de vencer que Vázquez Mota.

En todo caso, la disputa por la candidatura en el PAN es incierta, y lo que hoy es un escenario real entre los contendientes, puede cambiar en unas cuantas semanas, cuando arranque el proceso de sucesión presidencial, luego que su Consejo Político defina el 24 de septiembre las reglas para la nominación, con lo cual el juego volvería a empezar bajo parámetros radicalmente diferentes.

Las caravanas y las giras continuas sí funcionan, pero hay que dejar organización

Pedro Echeverría V.

1. Hoy lunes 19 llegará a la ciudad de México la Caravana convocada por Javier Sicilia después de recorrer durante once días una parte del Sur y Centro del país. Fue, como otras caravanas, un éxito porque movilizó a unas 70 mil personas en un promedio de 50 actos políticos de protesta. He participado en cuatro: la zapatista de febrero-marzo de 2001, la electricista de noviembre de 2003, la del Norte en mayo y la del Sur en septiembre de 2011 convocadas por Sicilia. En cada una de ellas se logró realizar decenas de actos en plazas públicas y auditorios con asistencia de 300 a 3 mil personas, además de mítines de arribo en el DF con asistencia de 50 mil a 150 mil personas al final, siempre atentas, entusiastas y combativas. El recibimiento de hoy en el Zócalo será masivo y de allí surgirán muchas ideas y propuestas.

2. Contrario a lo que los enemigos piensan y dicen, la realidad es que en las caravanas no hay tiempo para “turismo revolucionario” cuando se está atento por cumplir los objetivos, pero mucho más cuando se tiene la conciencia necesaria de hacer avanzar el proceso. Se sale muy temprano, se marcha a la entrada de cada pueblo, se reparten volantes, se realiza el mitin, se come lo que sea y se sale para otra población; en la tarde o muy noche se llega a otro lugar, se marcha, se hace mitin, se come y a dormir. No hay tiempo libre para pasear o conocer, pero sí para entrevistas, tomar direcciones, hacer citas para continuar en contacto. La preparación de la Caravana es más difícil: definir los objetivos, seleccionar y contactar los lugares, ver las carreteras, asegurar los actos y lograr apoyo solidario o comunitario en alimentos.

3. El problema central es el costo del viaje de los autobuses. En la caravana zapatista cada grupo alquilo una unidad y cada quien pagó su pasaje dividiendo el costo; en el caso de las caravanas electricistas, los compañeros del SME aportaron la mayor parte y en cuanto a las de Sicilia, al parecer, se buscaron apoyos externos, mas alguna aportación mínima de los caravaneros. En cada caravana recibimos de la población alimentación pobre, pero suficiente; así como lugares amplios bajo techo para dormir, aunque fuera en el suelo. Por eso la preparación de la Caravana –que lleva varias semanas- es más importante que el recorrido. Imagínense que todos los componentes de la caravana sean activistas indomables como uno de los compañeros que con un bote pedía solidaridad económica pero diciéndoles antes un largo discurso explicando objetivos y política.

4. Las Caravanas podrían ser un magnífico medio para concienciar a la gente y organizar al pueblo. La caravana zapatista duró 12 días con 45 autobuses donde viajamos activistas de México y otros países, encabezados por los famosos “monos blancos” italianos autoentrenados para proteger al EZLN y la caravana. La de los electricistas fue organizada en seis rutas, con dos o tres autobuses por ruta, que en seis días coordinaron el mismo día y la misma hora a la ciudad de México. Los dos de Sicilia, la del Norte y la del Sur, duraron de nueve a 11 días –con 15 a 20 autobuses, y concluyeron como las otras en el Zócalo de la Ciudad de México. La tribuna y los oradores en las caravanas fueron seleccionados por los zapatistas, y los Sicilistas en su caso; sin embargo en la electricista fue absolutamente libre.

5. En cuanto a López Obrador, a pesar de sus miles de mítines, estoy seguro que tendrá ya que caminar por la construcción de su “Plan B” porque el PRI de Peña Nieto y Televisa van a barrerlo en lo electoral sin poder defenderse. Los mítines de Peña Nieto –antecedidos por mil autobuses de acarreados con tortas, jugos y dinero- se repetirán en todo el país, y los anuncios, entrevistas y comentaristas de la TV, están listos desde hace meses. ¿Está listo el “Plan B” de AMLO que enterrará las esperanzas electorales y tomará el camino de la agitación contra la clase política, el empresariado explotador y reaccionario, el alto clero y el imperio yanqui? Morena puede estar muy bien en número de afiliados, pero su nivel de conciencia es tan bajo que no resiste un cañonazo de dos o tres despensas, un piso de cemento y una cuantas láminas de cartón.

6. Hay que buscar algunas salidas reales y no seguir con la esperanza en derrotar electoralmente a Peña Nieto, Televisa, los empresarios, el alto clero y el imperialismo que lo apoyan. Si en 2006 dormí solidariamente tres semanas en el Zócalo para apoyar la justa batalla contra Calderón, ahora no me van a faltar energías para reírme de una socialdemocracia o izquierda que no sabe más que poner pretextos y lloriquear derrotas. Sólo me queda pedir a los asesores de AMLO que preparen el “Plan B” porque el PRI parece que barrerá con todo; y el PAN –como un partido prostituto- les ha entregado las nalgas, aunque diga lo contrario. Si Ebrard sigue en serio como oportunista, el PRD sigue en manos de “los chuchos” y Peña Nieto sigue a “tambor batiente” ocupando todos los medios y las encuestas, AMLO debe olvidarse del camino electoral.

7. La gente más o menos consciente en México está hasta la madre por tanta miseria, desempleo, explotación y corrupción. No parece estar dispuesta a esperar más décadas o siglos de sufrimiento. Desafortunadamente la mayoría de esa población pobre y miserable vive completamente desesperada buscando en lo que comerá mañana junto a sus hijos; pero también un gran sector de las clases medias pasa el tiempo frente la televisión profundizando su enajenación. Espero que AMLO tenga la suficiente capacidad y paciencia para analizar lo que sucederá en estos últimos tres meses de 2011 y lo que se vislumbra para 2012 antes de los comicios. Hay mucha, muchísima gente dispuesta a apoyar una propuesta de izquierda siempre que sea real y sin posibilidades de un viraje hacia la derecha por conveniencias.